Jesús Calma la Tempestad

La Tempestad en el Mar de Galilea
by Rembrandt
Jesús Protégenos
Si tenemos fe, Jesús nos protegerá en tiempos difíciles
Mc. 4:35-41

Jesús Calma la Tempestad

Al atardecer de ese mismo día, les dijo: «Crucemos a la otra orilla».

Ellos, dejando a la multitud, lo llevaron a la barca, así como estaba. Había otras barcas junto a la suya.

Entonces se desató un fuerte vendaval, y las olas entraban en la barca, que se iba llenando de agua.

Jesús estaba en la popa, durmiendo sobre el cabezal.

Lo despertaron y le dijeron: «¡Maestro! ¿No te importa que nos ahoguemos?». Despertándose, él increpó al viento y dijo al mar: «¡Silencio! ¡Cállate!». El viento se aplacó y sobrevino una gran calma.

Después les dijo: «¿Por qué tienen miedo? ¿Cómo no tienen fe?».

Entonces quedaron atemorizados y se decían unos a otros: «¿Quién es este, que hasta el viento y el mar le obedecen».

Fuente

El Evangelio Según San Mateo 8:23-27 ; San Marcos 4:35-41 ; San Lucas 8:22-25
La Biblia

Documentos

Homilía Sobre El Evangelio Según San Mateo 8:23-24
Por San Juan Crisóstomo

Recursos

Comentario Al Evangelio Según San Mateo 8:23-27
Por San Teofilacto de Ohrid

Comentario Al Evangelio Según San Lucas 8:22-25
Por San Cirilo de Alejandría